El auge tecnológico y la transformación digital, así como la constante necesidad de protección de la información, hacen que la banca y otros sectores cada vez estén incursionando en mecanismos digitales y automatizados, los cuales requieren de un cumplimiento estricto de normas y estándares. Por ejemplo, para las entidades vigiladas por la Superintendencia Financiera de Colombia, se debe cumplir con la Circular Externa 007 de 2018, que contempla las etapas de seguridad de la información cómo la prevención, protección, respuesta y comunicación ante incidentes cibernéticos. Esta norma requiere de estricta aplicación y es susceptible de auditoria para garantizar su adecuado cumplimiento.
Las entidades no vigiladas pueden realizar este tipo de auditoria para asegurar sus activos de información y contar con la tranquilidad de la operación tecnológica.
